No podría vivir en paz conmigo mismo si te causara daño alguno. La idea de verte inmóvil, pálida, helada... No volver a ver cómo te ruborizas, no ver jamás esa chisma de intuición en los ojos cuando sospechas mis intenciones... Sería insoportable. Ahora eres lo más importante para mí, lo más importante que he tenido nunca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario